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Alto índice de fracasos y la falta de presupuesto fue lo malo de la educación en el año que finalizó

Javier Collins Agnew
La Verdad Panamá

El elevado índice de fracasos y la falta de un presupuesto cónsono con la realidad nacional, fue la nota mala de la educación nacional en el año 2022 que recién finalizó.

La Verdad Panamá consultó dirigentes de gremios docentes  para conocer lo que consideraron lo bueno, lo malo y lo feo en materia educativa en el período 2022 y sus expectativas para el año 2023 que acaba de comenzar.

El dirigente Luis Lopez vio como malo el aprendizaje de los estudiantes, luego de la pandemia que aún se vive y que golpeó muy fuerte a estudiantes, padres de familia y a los propios docentes.

La nivelación del año escolar 2022 estaba muy difícil y complicada, adicional a la falta de un presupuesto adecuado para atender las necesidades urgentes del sistema educativo, compra de equipos y materiales pedagógicos abastecimiento de los talleres con herramientas necesarias para que nuestros estudiantes salgan o puedan practicar debidamente”, aseguró López.

El dirigente evaluó el año lectivo 2022 como regular y prueba de ello es que se dispararon los índices de niños y jóvenes reprobados y la gran cantidad de alumnos que desertaron del sistema educativo y otros que no pudieron ingresar.

“Tenemos un gran reto este año que es despertar el interés de los muchachos en el estudio y lograr que los padres de familia atiendan con mayor eficiencia la educación de sus hijos, aunque sabemos que la falta de recursos económicos muchas veces no le permiten a muchos padres de familia atender debidamente a sus hijos”, sostuvo.

El docente espera que este año la situación mejore, aunque no ve muy claro el panorama por el presupuesto asignado para la educación, unos 300 mil dólares, por encima de lo asignado el año pasado, dinero que no es suficiente para atender la educación del país.

“No vemos un año escolar 2023 muy halagador, pero los docentes haremos todos los esfuerzos necesarios como siempre  pero necesitamos la colaboración del gobierno de los padres de familia y de nuestros queridos estudiantes”, destacó López.

Por su parte el portavoz de la Asociación de Maestros de Veraguas (Amave), Humberto Montero destacó como lo del año que recién finalizó que los docentes iniciaron con mucha responsabilidad la presencialidad en las escuelas.

Unos 48,500 educadores asumieron el reto de la presencialidad porque la educación a distancia de los años 2020 y 2021 no fue lo mejor, aunque se hizo todo el esfuerzo posible, aseguró.

El dirigente de Amave dijo que lo malo fue la falta de herramientas tecnológicas que en pleno siglo 21 son necesarias porque los estudiantes las requieren y el país no se puede quedar atrás, pero el Meduca no brindó las herramientas para lograr un total éxito en el proceso enseñanza-aprendizaje.

Montero aseguró que la cara fea fue que el Meduca no ha resuelto el tema de las escuelas ranchos que sean reemplazadas por escuelas dignas.

La Verdad Panamá  hizo varios intentos y logró conversar a través de mensaje de texto con el Secretario General de la Asociación de Profesores (Asoprof), Fernando Ábrego, quien se comprometió da brindar su opinión, pero al final no se recibió ninguna, por lo que los esfuerzos fueron en vano.

En ocasiones anteriores el dirigente Ábrego ha ignorado solicitudes de entrevistas que se hicieron a través de la plataforma de mensajes WhatsApp, dejando a este medio en el popular y muy conocido “visto”.

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