Bomberos vigilan Cerro Patacón ante la sospecha de que un pirómano está provocando los constantes incendios
* Se quejan de que el lugar es insalubre, está repleto de roedores, gusanos, moscas y mosquitos. Estamos de guachimán, dicen
Javier Collins Agnew
La Verdad Panamá
Una o varias personas con una tendencia patológica a la provocación de incendios, ha ocasionado que el Cuerpo de Bomberos de Panamá, despliegue unidades bomberiles en Cerro Patacón, a fin de detectar a los pirómanos, trabajo inusual que están realizando los camisas rojas y que les ha provocado molestias ante la insalubridad ambiental que tienen que soportar en turnos de doce horas.
Una fuente bomberil dijo a La Verdad Panamá que prácticamente los tienen deguachimán, palabra derivada del vocablo inglés watchman que significa vigilante, trabajo inusual que según el informante debe realizar la entidad de seguridad del país.
El portavoz de los apagafuegos que ahora realizan labor de vigilancia, explicó que el lugar es insalubre, esta repleto de roedores, gusanos, moscas y mosquitos, alimañas que deben soportarlo en turnos de 12 horas, permaneciendo en una carpa y realizando descansos breves en unos catres que hacen las veces de cama.
La fuente aseguró que tienen una semana de presencia permanente en el colapsado vertedero, luego de una fuerte sospecha de que los incendios ocurridos en Cerro Patacón, fueron ocasionados por alguna mano criminal.
En lo que va del año dos incendios de grandes magnitudes han tenido que ser sofocados por diversas estaciones del cuerpo de bomberos, trabajo que se ha realizado durante varias semanas, ante la gran dimensión de los siniestros.
El primer incendio ocurrió el 18 de enero, fuego que fue combatido hasta finales del mes de febrero, más de un mes de trabajo bomberil para lograr su extinción, mientras que el segundo siniestro en Cerro Patacón, fue declarado el 11 de marzo.
Tras el segundo incendio que fue combatido durante todo el mes de marzo, se tomó la decisión de realizar trabajos de vigilancia o establecer prácticamente una base bomberil en el área a fin de dar una respuesta más rápida en caso de nuevas llamas.
La sospecha de que una mano criminal es la causante de los incendios de Cerro Patacón, fue una tesis del teniente coronel de los camisas rojas Ángel Delgado, desde aquel primer incendio el 18 de enero.
Delgado señaló que había fuertes indicios. de que el incendio había sido provocado, pero que tocará a las autoridades de investigación determinar la presencia de algún individuo.
Aunque se desconoce el resultado de la investigación ya que no se ha hecho pública, el despliegue de seis unidades de los camisas rojas en turnos de 12 horas en el mismo lugar de los hechos dan cuenta posiblemente de la existencia de alguna mano criminal.
Según las estadísticas en el año 2023, unos quince incendios fueron reportados en Cerro Patacón, ninguno con la intensidad de estos dos siniestros del presente año.
Según los expertos, un pirómano tiene sensaciones de tranquilidad, placer, logro, provecho, esmero y hasta encanto por todos los actores e instituciones que hace movilizar, tras provocar un fuego.
El vertedero de basura surgió para los años de 1980 cuando se cerró el antiguo crematorio de Panamá viejo, terrenos que hoy día ocupa Costa del Este, un conglomerado de rascacielos ocupados por la clase alta del país y que al inicio aún luchaban contra la gran cantidad de mosquitos que rehusaban a retirarse del lugar.
Cerro Patacón en sus inicios era operado por el Estado a través del Municipio de Panamá, pero en el 2008 el Concejo Municipal toma la decisión de otorgarlo en concesión a Urbasel Protosa, empresa española que dos años después pasa la administración a Urbalia.
Segun los expertos, el problema del colapsado vertedero es muy grave, incluso por los problemas de salud que provoca, a los residentes de las comunidades contiguas, área poblacional que hasta creció, cuando se redujo a tan solo kilómetro y medio, el límite hasta donde podían vivir las personas, de un relleno sanitario.
El Ministerio de Salud fue el primero en dar la voz de alerta de esta decisión, porque esto afecta la salud de las personas que residen en el lugar, zona que no es apta para vivir por malos olores, lixiviados y alimañas.
En marzo de 2021, la Dirección General de Salud Ambiental del Minsa, en un informe reveló la existencia de cinco comunidades detectadas, asentadas en las proximidades del relleno sanitario, Cuipo 1, Cuipo 2, El Relleno, La Isla y Calle 50. Se instaló una mesa de trabajo para definir qué casas deben salir de la zona, pero poco o nada se conoce.
Hoy se cree que la mano de un pirómano, está provocando los incendios y todo apunta a que se trata de personas que viven en las entrañas del vertedero de basura de Cerro Patacón y que desean el cierre del vertedero para que sus residencias tengan un mejor valor.