Gobierno anuncia reactivación de proyecto minero afectado por crisis sindical
El Gobierno anunció hoy que la empresa Minera Panamá, subsidiaria de la canadiense Firts Quantum, y el principal sindicato del país, Suntracs, alcanzaron un acuerdo que permitirá la reactivación de un proyecto minero de 6.400 millones de dólares, paralizado desde hace más de una semana.
El acuerdo que se alcanzó “hoy martes 20 de marzo, pone fin al conflicto laboral en el Proyecto Cobre Panamá”, y permitirá a la empresa “reiniciar labores en un período prudencial de tiempo que facilite la entrada organizada de los diversos grupos de rotación de trabajadores”, informó el Ministerio del Trabajo y Desarrollo Laboral (Mitradel).
El convenio “garantiza el libre ejercicio del derecho a la libertad sindical por parte de los diversos sindicatos que representan a los trabajadores de la empresa”, añadió un breve comunicado del ministerio.
El centro del conflicto, que involucró varias paralizaciones del proyecto desde enero pasado, es una puja entre el sindicato de la mina, el STM, afiliado a Convergencia Sindical, y el Sindicato Único Nacional de Trabajadores de la Construcción y Similares (Suntracs).
Cada una de esas organizaciones dice tener el mayor número de afiliados y, por lo tanto, el derecho legal de negociar con Minera Panamá una nueva convención colectiva.
El ministro del Trabajo, Luis Ernesto Carles, explicó el viernes pasado que existe una convención colectiva vigente en manos del STM y que la próxima solo se puede comenzar a negociar a partir del 16 de mayo, al señalar la pretensión de Suntracs de que ese trámite se adelantara.
Tanto la empresa Minera Panamá como el STM acusan al Suntracs de “secuestrar” el proyecto, que contempla la exportación de unas 320.000 toneladas métricas de cobre por año una vez entre en vigor, previsiblemente este 2018, y de utilizar la “violencia e intimidación” para obligar a los trabajadores a afiliarse a ese sindicato.
El secretario general del Suntracs, Saúl Méndez, acusa por su parte al STM de ser un “sindicato amarillo”, es decir, creado y controlado por Minera Panamá, para negociar “un contrato amarillo en el que prácticamente roba todos los derechos a los trabajadores”.
La Cámara Minera dijo el sábado pasado que en el proyecto Cobre Panamá “no existe una huelga declarada por los trabajadores”, sino un paro derivado de la “necesidad de garantizar la seguridad de miles de trabajadores” ante las “tácticas intimidatorias” de grupos de personas, y señalo directamente al Suntracs.
“Con la firma de este acuerdo contentivo de 15 cláusulas, la empresa y el sindicato (Suntracs) se comprometen a garantizar la paz laboral para terminar en tiempo la obra”, indicó este martes el comunicado del Ministerio de Trabajo.
Añadió que el acuerdo se logró tras “intensas negociaciones” entre las partes en conflicto con la mediación de los ministerios de Trabajo, Comercio, y Seguridad.
El presidente panameño, Juan Carlos Varela, felicitó minutos después a los ministros panameños que han liderado las negociaciones y resaltó en un mensaje en su cuenta de Twitter que el objetivo de su Gobierno es “impulsar el diálogo para proteger la paz social y el progreso”.
“Felicito a representantes de Suntracs, Minera Panamá, los Ministros Luis Ernesto Carles, Augusto Arosemena y Alexis Bethancourt, que en 2 días de diálogo lograron establecer puntos de encuentro en el conflicto laboral; nuestro Gobierno impulsa el diálogo para proteger la paz social y el progreso”, indicó el mandatario en la red social.
El sector de la minería representa el 2,5 por ciento del producto interno bruto (PIB) de Panamá, y la Cámara Minera ha dicho que superará el 9,5 por ciento cuando comience la explotación de cobre en el proyecto de Minera Panamá, ubicado en Donoso, provincia caribeña de Colón y que registra un 77 por ciento de avance.
El contrato de Minera Panamá con el Estado panameño está vigente desde 1997, tiene una duración de 60 años y establece revisiones a sus cláusulas cada 20 años.
