Javier Collins Agnew / La Verdad Panamá
Panameños que mantienen préstamos hipotecarios en algunos bancos del país, fueron sorprendidos esta semana al anunciarles que el interés de sus préstamos aumentó y que tendrán que seguir pagando la mensualidad durante varios años adicionales, contados a partir de la fecha de cancelación pactada inicialmente.
Los clientes bancarios recibieron el aviso a través de correos electrónicos, decisión unilateral que tomaron algunos bancos y que de inmediato causó disgusto a las personas que mantienen préstamos con estas entidades financieras.
“Los constantes aumentos en tasa por la Reserva Federal de los Estados Unidos de América han provocado que la tasa actual se encuentre en el rango de 5.25% – 5.50%’, anunció el Blanco General, a través de un mensaje electrónico enviado a uno de sus clientes.
Según “Sus Buenos Vecinos”, este repunte en la tasa ha sido el más elevado de los últimos 15 años, por lo que analizaron su cartera de préstamos y depósitos para hacer los ajustes requeridos.
La importante entidad bancaria anunció a sus clientes que la nueva condición de los préstamos bancarios empezará a regir a partir del 20 de mayo de 2024, elevándose la tasa actual que era de 6.5 %, a 7.0 %.
El aviso emitido a sus clientes, recomienda extender la fecha de vencimiento proyectada de cada préstamo, a fin de que la mensualidad del préstamo no sufra cambios, una medida que según dice el mensaje enviado, es para apoyar al cliente en todo momento al no afectar su presupuesto.
Aunque la entidad bancaria asegura que no quiere afectar el bolsillo de los panameños, el abogado Geovanny Fletcher 
calificó la acción de estas entidades financieras de tener una actitud malsana en contra de sus clientes.
El jurista especialista en asuntos del consumidor sostuvo que la tasa de interés de la Reserva Federal de Estados Unidos frecuentemente baja y aquí no se ven los anuncios de que han disminuido la tasa de interés de los préstamos a sus clientes.
Fletcher quien es presidente del Instituto Panameño de Derechos de Consumidores y Usuarios (Ipadecu), tildó de usureros a los bancos panameños, mientras se lamentaba la ausencia de un trabajo de protección que haga la Superintendencia de Bancos de Panamá (SBP), en defensa de los prestatarios.
“Ellos como buenos usureros suben la tasa de interés, pero cuando vuelve a bajar no la regresan al porcentaje donde se encontraba, por lo que estamos analizando la presentación de alguna acción judicial contra las cláusulas bancarias”, destacó.
Fletcher aseguró que actualmente se está despertando el interés de algunas instituciones públicas de hacer algo más allá del trabajo ineficiente que  hace la SBP, una institución básicamente paralela a la industria bancaria, en cuya junta directiva no existe la figura de un representante de  usuarios bancarios, es decir clientes de las entidades, ni tampoco un representante del sector comercial.
El experto en defensa del consumidor, ante el cambio de gobierno que se avecina, dijo que la próxima administración debe presentar reformas a esta entidad de supervisión bancaria  para que se establezca en su junta directiva, representantes de los clientes bancarios, de tal forma exista un balance y los abusos sean menos frecuentes.
“Nosotros hemos presentado demandas contra algunos bancos por el establecimiento en los contratos de cláusulas abusivas, reglas que les permite subir la tasa de interés, cuando ellos lo decidan, sin llegar a algún acuerdo ni pedir autorización al cliente”, señaló.
Ante este escenario que se vive en Panamá, el cliente no tiene la oportunidad de retirarse de esa entidad e iniciar la  relación en otro banco, cuando la entidad aumenta el interés bancario más alto que el que inicialmente el prestatario pactó.
Fletcher explicó que las cláusulas bancarias establecidas en los contratos de préstamos, penalizan al cliente por retirarse del banco en menos tiempo, regla que debe ser eliminada de tal forma se le permita al cliente cambiar su proveedor financiero, cuando la persona lo crea conveniente.
El experto asegura que esto permitiría la competencia bancaria, una decisión que debe ser permitida al cliente, para que haga justicia frente a las irregularidades que cometen algunas entidades financieras.
Fletcher señaló que está dispuesto a presentar una demanda colectiva de clase, en contra de las entidades financieras, pero para ello tienen que haber suficientes personas que estén dispuestas a iniciar el proceso contra los bancos.
“El problema es que la población panameña es más bullanguera que justiciera.  La gente se queja, pero no presenta las demandas. Hablan mucho, pero hacen poco ni se organizan”, sostuvo.
Destacó que debido al elevado nivel de quejas e insatisfacción de la población de los servicios bancarios, la Autoridad de Libre Competencia y Asuntos del Consumidor (Acodeco) debería tener unas mil quejas en proceso contra los bancos, pero lamentablemente hay menos de cien.
El presidente de Ipadecu dijo que la población debe empezar a reclamar sus derechos, ante el alto nivel de abuso bancario que existe en el país, pero lamentablemente “el panameño es más bullanguero que justiciero”.