Ministerio Público busca contrarrestar voces de rechazo al polémico proyecto de extinción de dominio y comienza a venderlo
Javier Collins Agnew / La Verdad Panamá
El polémico proyecto que extingue el dominio de propiedad de los bienes de los ciudadanos, sean culpables o no, en una investigación, ha comenzado a ser divulgado por el Ministerio Público, a fin de contrarrestar el rechazo general que ha recibido el documento que reposa en la Asamblea Nacional de Diputados.
Para tal fin el principal ente de investigación de Panamá, invitó al país a la exjuez, exfiscal colombiana y consultora del vecino país, Sara Salazar, para que en un foro explicara a los panameños las bondades, aciertos y beneficios del proyecto de Extinción de Dominio.
Salazar sin titubear dijo tajantemente y con plena seguridad que si no se aprueba la norma, el país se llenará de delincuentes que encontrarán aquí, tierra fértil donde invertir su dinero mal habido, porque el brazo de la justicia se quedará corto para despojarlos de sus bienes ante la ausencia de leyes que lo eviten.
El taller de alcance nacional organizado por el Ministerio de Seguridad, es para sensibilizar a la sociedad civil y entidades sobre los beneficios si se aprueba la Ley de Extinción de Dominio, que lleva tiempo en la Asamblea Nacional, sin ser discutida por los diputados, pero ampliamente debatida por los panameños de todos los estratos sociales que miran con cautela el documento.
La experta proveniente del país pionero en la región con esta norma, trató de disipar el miedo existente entre los ciudadanos por el tema de la prejudicialidad, al decir con voz firme que los únicos que deben temer a esta ley son los ciudadanos corruptos.
Aseguró que la mayoría de países ya tiene la norma contra los bienes adquiridos ilícitamente, pero no enumeró la lista de cuales son esa mayoría de países.
La defensora de la norma aseguró que de no aprobarse, Panamá tiene que prepararse para recibir a los delincuentes, “porque ellos van a decir, como aquí no hay leyes, a mí no me van a quitar mis bienes, y no va ha pasar nada”.
Argumentó que la llegada de delincuentes inversionistas acarreará también un aumento de la violencia y criminalidad, problema que se desatará en el futuro.